dissabte, de gener 03, 2009

Vilamagore

Los vecinos de Sant Pere de Vilamajor protagonizan por quinto año una fiesta teatral que traslada a la edad media. No será necesaria ninguna máquina del tiempo o cualquier otro sofisticado artilugio. Será suficiente con el entusiasmo de los vecinos de Sant Pere de Vilamajor para lograr trasladar durante todo este fin de semana a esta localidad del Vallés Oriental hasta la edad media por quinto año consecutivo.

Desde anoche y hasta el próximo domingo, este pueblo de poco más de mil habitantes, en un entorno idílico de la falda del Montseny abre sus puertas y se transforma en un auténtico pueblo de la edad media. Justo al adentrarse en el casco urbano, el público podrá presenciar las contiendas entre los caballeros de la época, danzas populares, antiguos deportes o simplemente perderse en el mercado medieval —entre damas, juglares, malabaristas, faquires, músicos o mendigos— y degustar manjares de la época. Eso sí, no se puede comprar con dinero, sino con unas piezas especiales de barro que se intercambian en el mercado.

Hasta el último detalle está pensado y preparado para que los espectadores se sientan realmente transporta dos, a través del tiempo, hacia la época medieval. Tras todo este montaje se encuentra la mano de profesionales como el actor y director teatral Alfred Lu chetti, encargado de coordinar todo el espectáculo; el realizador de TV3 Xavier Berraondo, como director artístico; Mónica Lucchetti, actriz y directora de actores, y los artistas de La Cubana Jaume Baucis y Joan Maixenchs, responsables de organizar el mercado y la fiesta popular.

La organización espera la presencia de 8.000 espectadores en esta nueva edición del espectáculo. Las fiestas de Sant Pere de Vilamajor, conocidas bajo el nombre de “Les vetllades de Vila Magore”, conmemoran el nacimiento del primer rey de la corona catalano-aragonesa, Alfonso I el Casto, y pretenden revivir el protagonismo que Sant Pere tuvo durante la edad media, cuando se convirtió en residencia temporal de los condes de Barcelona. Por esta razón, en el año 1384 el rey Pere 1 el Cerimoniós le concedió el nombramiento de Carrer de Barcelona.

Uno de los actos más esperados es la representación teatral “Preséncia histórica e feyts de Vila Magore”, que puede contemplarse a las diez de cada noche del festival. En el decorado natural de la localidad se escenifican los principales acontecimientos históricos que se vivieron en Cataluña, concretamente en Sant Pere, entre los siglos IX y XII. La obra, dirigida por el actor Alfred Lucchetti y escrita por Francesc Bardera, cuenta con la participación de unos 150 actores aficionados. Durante todo el año, niños y mayores, básicamente de Sant Pere y de localidades del Vallés Oriental, se preparan para la representación.

Unas 500 personas, todas ellas aficionadas, participan en el montaje dirigido por el actor y director teatral Alfred Lucchetti “Cuando el domingo se acaba todo, ya empiezan a trabajar nuevamente en la próxima edición, preparando el vestuario y ensayando”, constata Aurora Murciano, miembro de la organización. En total, en las diferentes tareas de montaje e interpretación participan unas 500 personas, de las cuales sólo los equipos técnicos son profesionales. Los organizadores quieren introducir novedades en la obra de teatro, cara a la próxima edición, para evitar que el espectáculo se convierta en algo similar a la “Passió”, donde la representación es igual cada año. Aunque todavía quedan muchos detalles por perfilar, el espectáculo presentará temas medievales de manera monográfica sobre el amor, los animales míticos, los trobadores o las cruzadas

La vanguardia 11-7-1997